Nintendo se apunta a la moda low cost

Parece que la tendencia low – cost va a llegar a cualquier
sector… Imaginamos que llegará a cualquiera excepto al sector del lujo,
claro está, aunque quién sabe, cosas más raras se han visto.

El momento low – cost ha llegado para la
tecnología, con los iPhone de Apple en sus últimas versiones, y ahora para las
videoconsolas de la mano de Nintendo. ¿Funcionará? Honestamente, creemos que
sí. Para los nacidos a finales de los años 70 y principios de los 80, Nintendo
es un auténtico clásico que vivió una singular guerra con Sega, encabezada por
los incombustibles Mario y Sonic… Eran los años de la Nintendo Entertainment
System  o NES y de la Megadrive… Pero
dejemos la nostalgia para otro momento y veamos lo que han preparado los únicos
supervivientes del efecto Playstation, que contra todo pronóstico
sobrevivieron gracias a la hermana pequeña de la NES, la archiconocida Gameboy,
que resistió contra viento y marea.

Si hay algo en lo que Nintendo sea un experto es en
dispositivos portátiles, y es ahí donde han decidido atacar nuevamente,
lanzando la Nintendo 2DS, una portátil low cost. Veamos su posicionamiento en
precio.
TABLA 1

Comparación de precios, Nintendo 2DS, 3DS y 3DSXL

Fuente: elaboración
propia a partir de datos procedentes de El Mundo


Atendiendo a la tabla 1, parece
quedar claro el posicionamiento que ha preparado Nintendo para su gama DS,
quedando la Nintendo 3DS en el segmento medio, la 3DS XL como producto Premium,
y para el low end, con un producto en formato low cost, la 2DS, que seguro
muestra buenas cifras de ventas estas Navidades. 
La Nintendo 3DS XL es un 54%
más cara que la 2DS, diferencia que, a nuestro entender es suficientemente
grande como para explica este posicionamiento, hay espacio en el mercado para
las tres, aunque la última palabra a este respecto la tienen los consumidores.
En cuanto a las prestaciones de
la videoconsola, parece que son los suficientemente potentes como para arañar
un buen pedazo en el mercado

TABLA 2

Ficha técnica de
la videoconsola Nintendo 2DS


– Portátil
– Permite jugar con juegos de 3DS
– Carece de efecto 3D
– Precio: 129€
– Dirigido, en principio a una audiencia infantil
– Muy cómoda
– Aire retro
– Mantiene doble pantalla, una de ellas táctil

Pero, ¿cuál es su comparación
respecto a la Nintendo 3DS XL? Es decir, ¿por qué no pagar un 54% más y hacerme
con el producto Premium? Los señores de Nintendo saben bien lo que hacen, no
esperábamos menos de los padres de Mario y Luigi.

TABLA 3

Comparativa de peso de la Nintendo 2DS y la Nintendo 3DS XL


Fuente: elaboración
propia a partir de datos procedentes de El Mundo
Lo comentábamos antes, la
Nintendo 2Ds es muy cómoda, de hecho su peso es bajísimo, lo que hace que sea
apta para los más pequeños, y muy cómoda para cualquiera que desee jugar a los
clásicos de Nintendo, que los hay y muy buenos.

TABLA 4

Comparativa del tamaño de las pantallas de la Nintendo 2DS y la
Nintendo 3DS XL 


Fuente: elaboración propia a partir de datos procedentes de El Mundo
Desde luego, cuando diseñaron
este producto, los ingenieros de Nintendo sabían bien lo que hacían. Han hecho
una videoconsola más barata, más cómoda, más ligera, con el mismo tamaño de
pantalla que la 3DS XL, eso sí, sin el efecto 3D ¿Qué quiere esto decir? Los de
Nintendo lo tienen clarísimo, ese detalle no es para las masas, es para los
apasionados de los viedojuegos que están dispuestos a pagar un 54% más por
disfrutar de ello. Las masas sólo quieren jugar y pasar un buen rato, y para
estas, el 3D es perfectamente prescindible.

Desde Constanza Business &
Protocol School, queremos dar la enhorabuena a los señores de Nintendo, han
hecho un muy buen trabajo, que seguro que dará pronto sus frutos. La primera
gran batalla comienza dentro de nada, veamos si la joven low cost de Nintendo,
la 2DS, aguanta bien este primer envite que será la campaña de Navidad 2013.
Mucha suerte señores y larga vida a Mario y a su hermano Luigi.

El controvertido retrato de la familia real danesa

Recientemente la Casa Real de
Dinamarca ha hecho público un retrato de la familia real encargado al artista
Thomas Kluge. El artista ha tardado cuatro años en culminar su obra, que tiene
por nombre ‘Kongehuset’ o traducido al castellano Casa Real Danesa. En la
actualidad el retrato está expuesto al público y puede visitarse en el Museo del
Palacio de Amalienborg hasta marzo de 2014 donde forma parte de una exposición
denominada “Retratos Reales. Tras esta fecha el retrato se trasladará al Salón
Amarillo del Palacio de Fredensborg.
La obra no está exenta de
polémica, y ha dado la vuelta al mundo. Los medios de comunicación daneses así
como la sociedad del país no han aceptado bien este retrato. Además del toque
tétrico y serio de sus personajes, si se analiza desde el punto de vista de
protocolo se trata de un retrato que mira al futuro y no hace honor a la
actualidad de la casa real del país escandinavo. Hagamos un pequeño análisis
protocolario.

En protocolo, cuando hay que
ordenar a tres personajes, tiene mayor precedencia el que se sitúa en el centro
(1º) , a continuación quien se sitúa a su derecha (2º) (la izquierda desde el
punto de vista del espectador), y por último quien se sitúa a su izquierda (3º)
(la derecha visto desde el punto de vista del espectador). Tal como se refleja
en el siguiente croquis:  
2 1 3
Es decir, que si observamos el orden de precedencias correcto
en la actual casa real danesa, el número 1 correspondería a su soberana S.M. la
Reina Margarita. El número 2 a su esposo Henri de Monpezat, príncipe consorte y
el número 3 a su primogénito y príncipe heredero, Federico.
Si analizamos el orden de precedencias expuesto en el
retrato, este dista mucho de la realidad. El número 1 lo ocupa el Príncipe
Christian, hijo mayor del Príncipe Federico quien en realidad es el segundo en
la línea de sucesión al trono, superando a su propio padre, que queda relegado
a posiciones posteriores. En el número 2 del retrato se sitúa la Reina Margarita,
a quien debería corresponderle el numero 1. Y el número 3 ha sido asignado al
príncipe consorte, esposo de la reina, quien en realidad no tiene ningún
derecho sobre la corona danesa. En realidad es un retrato muy complejo ya que
mezcla cuestiones de protocolo oficial y de precedencias del estado, con temas
sociales donde según reza el protocolo, las señoras nunca pueden ocupar las
esquinas.
Este retrato no es el primero que se realiza en la Casa Real
Danesa, ya que hace 125 años se realizó el primer retrato de familia
representando al Rey Christian IX y a la Reina Luisa junto a su familia. En
este caso, los reyes obtienen la precedencia ocupando el lugar destacado del
retrato. El retrato fue denominado Imágenes de Fredensborg y fue realizado por
la artista Laurits Tuxen.
En cualquier caso, la obra no deja de ser un retrato de
familia y como tal hay que concederle una importancia relativa. Desde Constanza
Business & Protocol School deseamos una larga vida a la actual soberana y
esperamos seguir viendo muchos retratos de esta familia real.

Ferrari, una muy buena inversión

Lo sabemos, más de una vez habrá
escuchado aquello de «un coche no es una inversión, es un gasto, su valor
no hace más que depreciarse desde que lo sacas del concesionario»; es una
gran verdad, a no ser que compre Vd. un Ferrari… Aunque claro, habrá quien
diga que un Ferrari no es un coche, es algo más, una pieza de arte, un ser
cuasi – divino.

Sea como fuere, en estos momentos
de gran tensión económica y de grandes fluctuaciones en los mercados
financieros internacionales, parece que Ferrari se ha convertido en un valor
refugio, más o menos como el oro. Parece que el mensaje ha sido el siguiente:
«Estimado inversor, ¿tiene miedo? Quédese tranquilo y compre algo seguro,
invierta en un Ferrari».
Los Ferrari en particular, y
sobre todo los coches clásicos se han convertido en un valor refugio los
últimos años, al estar los inversores más que aburridos de sufrir el continuo
rally bursátil en que se han convertido los mercados de capitales.

Como ejemplo, lo que un inversor
anónimo pagó por un Ferrari 250 GTO de 1963, restaurada por el ex piloto Paul
Pappalardo, 52 millones de euros. ¿Por qué es este modelo tan caro? Por su
escasez, los italianos apenas produjeron 39 unidades de este mítico
superdeportivo.
Parece por tanto que comprar un
coche puede salir más que rentable, eso sí, asegúrese de que más que un coche
sea una pieza de arte.

Una Reina y tres futuros Reyes. La historia se repite.

El 23 de Octubre de 2013 fue un día
histórico para el Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del Norte. Con
motivo del bautizo del Príncipe Jorge Alejandro Luis, cuatro generaciones de
reyes se reunieron en la misma fotografía.

La actual Reina Isabel II es la
decana de los Jefes de Estado europeos. Se convirtió en heredera a la corona
británica con diez años de edad cuando su padre fue coronado tras la abdicación
de su tío. Se convirtió en Reina tras el fallecimiento del mismo en el año 1952
y su ceremonia de coronación fue seguida por miles de personas, ya que por
primera vez en la historia una coronación era retransmitida por televisión. La
Reina Isabel II lleva 61 años en su puesto.
Su hijo mayor, S.A.R. Carlos
Príncipe de Gales. Nació en Londres el 14 de noviembre de 1948 y es el “eterno”
heredero al trono. Se casó en primeras nupcias con la Princesa Diana de Gales
con quien tuvo dos hijos, los Príncipes Guillermo y Enrique. Tras su divorcio y
posterior muerte de la Princesa Diana, se volvió a casar en segundas nupcias
con Camilla Parker Bowles, a quien se conoce con el título de Duquesa de
Cornualles.
Su nieto, el Príncipe Guillermo,
hijo mayor de la difunta Diana. Casado con Catalina Elisabeth Middleton el 29
de abril de 2011, protagonizó  una de las
bodas reales más bonitas y seguidas de la historia. Recientemente, el 22 de
julio de 2013 ha sido padre de su primogénito.
Su bisnieto, el Príncipe Jorge
Alejandro Luis, ya archiconocido con sus escasos tres meses de edad. Su
bautizo, ha sido el motivo de esta histórica fotografía.
Curiosamente, el año 1984 nos dejó
una instantánea muy similar a ésta. S.M. la Reina Victoria, se fotografiaba
junto a tres príncipes que más adelante se convirtieron en reyes.
Su hijo, el entonces Príncipe
Eduardo que más adelante pasaría a ser rey con el nombre de Eduardo VII. Tras
el largo reinado de su madre, él apenas estuvo en el trono nueve años durante
los cuales renovó la flota británica e impulsó una alianza con Francia, país
por el que desde niño sentía fascinación. Casado con la Princesa Alejandra de
Dinamarca, tuvo seis hijos.
Su nieto, el entonces Príncipe
Jorge quien más adelante se convertiría en el Rey Jorge V. Durante los 26 años
que duró su reinado (1910-1936), le tocó vivir la Primera Guerra Mundial. En un
intento de limpiar el nombre de la familia real y eliminar cualquier connotación
germana, renombró a la Casa Real Británica sustituyendo el apellido
Sajonia-Coburgo-Gotha por el de Windsor, en alusión al famoso castillo. Desde
entonces, la dinastía británica es conocida como la dinastía Windsor.
Y por último su bisnieto, en el
momento de la fotografía era S.A.R. Eduardo, y pasaría a ser rey con el nombre
de Eduardo VII. Su reinado duró apenas un año, tras el cual decidió abdicar en
su hermano para poder casarse con Wallis Simpson, ciudadana americana y doblemente
divorciada. Tras la abdicación en su hermano, Jorge VI padre de la actual
reina, pasaría a los anales de la historia como el Duque de Windsor.
Desde Constanza Business &
Protocol School esperamos que nuestros lectores hayan disfrutado de este
pequeño repaso a la historia de la Casa Real Británica. Deberemos esperar
alrededor de un siglo para conocer la huella que estos tres futuros reyes, hoy
príncipes, dejarán en la historia futura.

La Reina Dña. Sofía cumple 75 años

Tanto se ha escrito acerca de Dña.
Sofía, Reina consorte de España, que no mucho más se puede añadir a su
biografía oficial; sin embargo, vamos a intentar desvelar algunas curiosidades
menos conocidas. Esposa, compañera, madre, abuela, y ante todo Reina, nuestra
querida Dña. Sofía, cumple hoy, 2 de noviembre, 75 años. Su vida, y su papel de
consorte al frente de una institución fundamental para los españoles, como es
la corona, ya forman parte de la historia.

De origen griego, nació en el
Palacio de Tatoi en Atenas en el año 1938. Sus padres, los entonces Príncipes Pablo
de Grecia y Federica de Hannover, tenían pensado ponerle de nombre Olga. Se
anunció su nacimiento mediante el repicar de las campanas del palacio, y ante su
llamada el pueblo griego acudió a las puertas del mismo coreando “Sofía, Sofía”
de manera incesante. Ante la petición de su pueblo, y casi a manera de presagio
de lo que en un futuro sería su labor de servir a sus gentes, finalmente adoptó
este nombre.
En su árbol genealógico se cuentan dos
emperadores germanos, ocho reyes de Dinamarca, cinco reyes de Suecia, siete
zares de Rusia, un rey y una reina de Noruega, una reina de Inglaterra y cinco reyes
de Grecia. Impecable ascendencia para quien ha sabido desempeñar de manera
exquisita su labor al frente de la corona española.
Parte de su niñez la vivió en el
exilio junto a sus padres y sus dos hermanos: El entonces príncipe Constantino,
posterior Rey Constantino II de Grecia, y su hermana e inseparable compañera,
la princesa Irene, princesa, al igual que lo fueron sus hermanos, de Grecia y
Dinamarca por provenir de la casa Schleswig-Holstein-Sonderburg-Glücksburg.
Como si de la novela de Fernando de
Rojas se tratase, su madre, la ya Reina Federica, actuó de celestina
organizando un crucero en el año 1954 para que todos los príncipes y princesas
reales de Europa se conocieran. Fue en esta travesía donde conoció al entonces
Príncipe Juan Carlos de España. Ambos contaban 15 y 16 años de edad
respectivamente. 
Apenas tres encuentros más, desembocaron en un noviazgo que
comenzó en la isla griega de Corfú y en la boda que se celebraría en Atenas
bajo dos ritos, el católico (en la catedral católica de San Dionisio
Aeropagita) y el ortodoxo (en la catedral metropolitana de la Anunciación de
Santa María), el 14 de mayo de 1962. La pedida de mano del Príncipe Juan Carlos
fue especialmente original, ya que la propia reina reconoció que le lanzó la
alianza de compromiso con un “cógelo, Sofi”. Y al igual que le ocurriría a su
hija la Infanta Dña. Elena el día de sus esponsales con D. Jaime de Marichalar,
antes del “Sí, quiero” (Ne Theló), olvidó pedir consentimiento a su padre, y
rompió a llorar.
Su boda, fue aprobada por todas las
casas reales europeas, así como por Franco, quien no estuvo presente en la
misma pero mandó una representación militar al evento. Siguiendo la costumbre
de la época, el menú nupcial se escribió en francés, y consistió en un entrante
de cócktail de langosta, seguido de suprema de ave a la manera del chef,
verduras, foie-gras a la gelée, ensalada, helado de moka y frutas.
El resto de su historia, ya es de
todos conocida: su llegada a España junto al Príncipe Juan Carlos instalándose en
el Palacio de la Zarzuela, el nacimiento de sus tres hijos, la Infanta Dña.
Elena, la Infanta Dña. Cristina y el Príncipe D. Felipe. Su ascensión a reina
consorte de España el 22 de noviembre de 1975 y su trayectoria al lado de su
marido representando a la corona española.
Una vida ejemplar, para una figura
especialmente apreciada y querida por todos los españoles. Desde Constanza
Business & Protocol School deseamos a S.M. un muy feliz cumpleaños.

El Protocolo de los Premios Príncipe de Asturias

Los Premios Príncipe de Asturias se
crearon en el año 1981 y hoy en día su ceremonia de entrega se ha convertido en
un acontecimiento de interés internacional por la aportación que suponen al
patrimonio cultural de la humanidad. Se entregan ocho categorías: Artes,
Ciencias Sociales, Comunicación y Humanidades, Cooperación Internacional,
Investigación Científica y Técnica, Letras, Deportes y Concordia.
Desde su comienzo, la entrega de
los premios ha supuesto importantes retos a sus organizadores desde el punto de
vista de protocolo. Salvados, eso sí, de manera excelente. Vamos a analizar en
este post, uno de ellos.
El heredero a la corona española,
S.A.R. el Príncipe de Asturias, es el encargado de entregar estos premios que
llevan su nombre, y como tal, todos los años se desplaza a la ciudad de Oviedo
y más concretamente al Teatro Campoamor, en su día grande. Siempre lo ha hecho
acompañado de su madre, S.M. la Reina Dña. Sofía, y en los últimos años también
de su esposa Dña. Letizia.
Los Premios los convoca la
Fundación Príncipe de Asturias, y el Príncipe Felipe es su Presidente de Honor,
lo que lo convierte en anfitrión del acto y responsable de entregar los premios
que llevan su título. Sin embargo, si se sigue el Real Decreto de Precedencias
del Estado 2099/83, la Reina tiene precedencia sobre su hijo el Príncipe
heredero, con lo que la presencia de la Reina en la tribuna presidencial,
dejaría a su hijo en un segundo lugar.  
¿Cómo salvar este problema? Año
tras año, los organizadores del acto actúan del mismo modo: la Reina no puede
situarse en la mesa presidencial junto a su hijo. ¿Dónde colocarla entonces? No
se trata de una simple invitada. Se opta pues, por otorgarle un lugar de honor
entre los invitados. La Reina, preside el Palco Real del Teatro Campoamor,
dejando encabezar la mesa presidencial a su hijo, que ejerce de anfitrión de
los premios.

El protocolo y la organización de
la ceremonia, como cada año, ha conseguido una puesta en escena estupenda y
perfecta. Ahora queda a los periodistas y seguidores de tendencias analizar si
el vestido de nuestra princesa fue más o menos bonito o si su peinado fue más o
menos acertado.

Desde Constanza Business &
Protocol School felicitamos a la Fundación Príncipe de Asturias así como a
SS.AA.RR. quien un año más no nos han defraudado en su gran día.